Cómo los conductores de autobuses escolares usan las matemáticas todos los días en sus trabajos
Claudia Zavala aplica sus habilidades matemáticas en el mismo distrito escolar donde se crio. La orgullosa graduada del Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles (LAUSD, por su sigla en inglés) actualmente trabaja como supervisora de transporte en las oficinas de la División de Servicios de Transporte* en el centro de Los Ángeles. Este puesto administrativo implica la coordinación de las rutas de autobús de miles de estudiantes del distrito. En el departamento de transporte del Distrito de Escuelas Secundarias de Whittier Union, Marcus Zapata aplica las matemáticas de formas esperadas y no tan esperadas, ya sea que su día lo lleve a la oficina a realizar tareas administrativas o a bordo de un autobús escolar para capacitar a nuevos conductores.
Zavala comenzó a explorar opciones de trabajo en el sitio web del LAUSD en 2009 después de trabajar en un programa extracurricular.
“Tenían un volante que promocionaba puestos de conductor de autobús con capacitación gratuita”, indica Zavala, quien creció en Echo Park y en realidad nunca necesitó viajar en un autobús del LAUSD porque siempre vivió cerca de la escuela. “Había trabajado con estudiantes antes, por lo que me interesaba poder conducir un autobús escolar. Así que solicité el puesto”.
La población estudiantil de Zavala estaba compuesta principalmente por personas inscritas en programas de educación especial, desde niños en edad preescolar hasta adultos. Como conductora sustituta de autobús, su semana de trabajo podía llevarla a diferentes escuelas dentro del distrito. Sin embargo, una cosa se mantuvo constante: “Mi prioridad siempre ha sido transportar a los estudiantes de manera que se sientan cómodos”, dice, “y que tengan un viaje seguro entre la casa y la escuela”.
Ella enfatiza que un conductor de autobús escolar debe permanecer enfocado para lograrlo. Una vez que comenzó a conducir, tenía que estar al tanto de todos los vehículos y peatones a lo largo de la ruta y limitar su interacción con los estudiantes durante el viaje.
“La mayor interacción que uno tiene con los estudiantes probablemente es al comienzo del día cuando los recoge, porque usualmente uno es la primera persona que ellos ven”, recuerda Zavala, quien siempre se esforzó por darles a los estudiantes un comienzo positivo cada mañana con un amistoso saludo. “Hablar español e inglés me ayudó a ser eficaz al platicar con los estudiantes, los padres de familia y los compañeros de trabajo”, agrega.
El trabajo también requería que practicara una de las materias que mejor dominaba en sus tiempos de estudiante del LAUSD. “Cuando era conductora, usaba las matemáticas a lo largo del día para analizar tiempos de viaje y resolver problemas”, explica Zavala. “Calculaba el tiempo entre el punto A y el punto B” para llevar a los estudiantes a la escuela y al hogar a tiempo y cumplir con una importante norma de los autobuses del LAUSD: el tiempo de viaje del estudiante no debe exceder los 90 minutos.* Esta no siempre fue una tarea fácil teniendo en cuenta que el tráfico de Los Ángeles puede ser impredecible.
Ejemplo de un problema matemático del día laboral de Zavala: tenía ocho paradas a lo largo de una ruta, que estaban a cinco minutos la una de la otra. ¿Cuánto tiempo tardaría en ir de la escuela a la casa del último estudiante? ¿Cuánto tiempo adicional necesitaría entre paradas en caso de que hubiera tráfico?
Las matemáticas no se limitaban a eso. “También contaba a los estudiantes cuando subían al autobús para asegurarme de que tenía 10 pasajeros al final del día”, que era el número de estudiantes asignados a su ruta.
En 2021, Zavala fue ascendida a supervisora asistente de autobuses de área y este año, a supervisora de transporte. Las matemáticas continúan formando parte de su día laboral en el puesto actual, al satisfacer las necesidades de transporte de los estudiantes. “Digamos que hay 100 estudiantes que necesitan transporte en una escuela en particular”, plantea como un ejemplo de una ecuación. “Tenemos que averiguar cuántos autobuses necesitaremos para esos 100 estudiantes”.
Sus responsabilidades y el número de estudiantes a los que atiende diariamente han aumentado significativamente. “Cada supervisor tiene entre 150 y 200 escuelas a su cargo, y cada escuela, alrededor de 200 rutas”, dice, con un rango de 10 a más de 65 estudiantes por ruta. Le dejaremos a usted calcular cuántos pasajeros estudiantes atiende en total: son muchos.
“Las matemáticas pueden ser complejas o pueden ser versátiles. Se pueden usar para resolver problemas o para algo tan sencillo como contar dinero cuando vas a un restaurante... [o] para ayudarte a saber la hora”, dice la veterana del transporte. “Uso números todos los días, como números de teléfono, números de identificación de estudiantes, números de ruta y el calendario. Aplico las matemáticas para analizar datos en informes de transporte de estudiantes. Me encantan las matemáticas porque me gusta el desafío, y encontrar la respuesta cuando resuelvo un problema matemático puede ser muy satisfactorio”.
Dato curioso: La División de Servicios de Transporte atiende a más de 30 000 estudiantes diariamente. Casi 10 000 estudiantes de educación especial viajan a la escuela en autobuses del LAUSD.
Al este de Los Ángeles, en el Distrito de Escuelas Secundarias de Whittier Union, Marcus Zapata siguió una ruta diferente para convertirse en conductor de autobús. Creció y asistió a la escuela en la cercana ciudad de La Habra, donde recuerda haber viajado en autobuses escolares para asistir a competencias como miembro de la banda de su escuela secundaria. Su experiencia profesional comenzó como transportista de vehículos para una compañía de alquiler de automóviles en el condado de Orange. Luego, en 2018, cambió de marcha.
“Conocí a alguien que había sido conductor de un autobús escolar”, dice Zapata. “Después de tres largos meses de estudio y capacitación, obtuve mi certificación de autobús escolar, ¡y aquí estoy!”.
Zapata ha tenido algunos trabajos diferentes dentro del departamento de transporte de su distrito, y las matemáticas han entrado en juego de diferentes maneras. “Una de las formas esperadas en que uso las matemáticas en el trabajo es para llevar el control de las millas que conduzco en el autobús, pues tenemos que preparar informes de gastos y costos de combustible al final de cada año escolar”, indica Zapata.
Otros aspectos matemáticos de su trabajo son más sutiles. Por ejemplo, utiliza las matemáticas para monitorear los frenos de aire “y saber cuándo se vuelven a llenar de aire y cuánto aire estamos perdiendo en los autobuses”, además de garantizar que estén en perfecto funcionamiento todos los días para una operación segura. “Hay muchas otras leyes estatales que tenemos que seguir y muchos números que recordar”.
En marzo de 2019, Zapata hizo la transición a empleado administrativo, un puesto en el que se encargaba de la facturación de las excursiones escolares, las planillas de los conductores y otras tareas administrativas en las que tenía que usar las matemáticas todos los días. Hoy en día entrena a otros conductores de autobuses escolares, “pero todavía cubro rutas cuando es necesario, ¡así que cada día es diferente para mí!”.
La educación matemática de Zapata y Zavala les ha ayudado a encontrar satisfacción en sus carreras de transporte escolar. Zavala dice que el aspecto más gratificante de su trabajo como conductora de autobús es “poder ver a los estudiantes graduarse de la escuela intermedia y pasar al siguiente capítulo de sus vidas”. Mientras tanto, Zapata siente “una enorme sensación de logro al saber que hice todo lo posible para transportar a los niños a la escuela o al hogar de manera segura”. Él aprecia la oportunidad de poder conocer a sus estudiantes personalmente. “Es muy gratificante porque sé que estoy teniendo un impacto en sus vidas”.
*Recurso disponible solo en inglés.