¡Déjelos jugar! Fomente la curiosidad en los jóvenes estudiantes con piezas sueltas
Publicado en inglés el 17 de diciembre de 2020.
¿Alguna vez ha visto a un niño convertir una caja vacía en una nave espacial a punto de despegar? ¿O transformar un par de tubos de papel higiénico en binoculares?
Los niños pequeños le encuentran sentido al mundo que los rodea a través del juego. Los expertos en desarrollo infantil saben que el juego* es lo que los niños necesitan para explorar conceptos difíciles, establecer conexiones profundas con los demás y convertirse en estudiantes curiosos y participativos.
El enfoque Reggio Emilia es una forma de enseñar que le da prioridad al juego. Este sistema se fundamenta en el hecho de que los niños son curiosos, creativos y capaces por naturaleza, al tiempo que alienta a los educadores a conectarse con los procesos de aprendizaje de los niños a través de la observación y el juego. Una parte esencial del enfoque es incorporar las llamadas ‘piezas sueltas’ al juego, lo que propicia la curiosidad y el metaconocimiento en los niños.
Aunque suene abstracto, las piezas sueltas son simplemente materiales que se pueden mover, diseñar, rediseñar y manipular. Cualquier cosa funciona: trozos de cuerda, cajas vacías, botones y más. Este tipo de objetos crean muchas más oportunidades para la participación creativa que los objetos estáticos como un martillo de plástico o un trozo de comida de juguete, porque cuando los niños trabajan con piezas sueltas, desarrollan habilidades como la resolución de problemas, la creatividad, la concentración, el pensamiento matemático, la alfabetización y el lenguaje. Además, también experimentan un crecimiento socioemocional y una mayor autoexpresión. Con el tiempo, el juego se vuelve más abierto y se desarrolla de muchas maneras diferentes.
Desde aros de cartón hasta tapas de frascos, desde bufandas hasta cintas, desde tubos de papel higiénico hasta cajas vacías, ¡las piezas sueltas se encuentran por todas partes! Los tubos de papel higiénico se convierten en binoculares cuando su hijo se va de safari en la sala de estar. Las bufandas se convierten en hermosos vestidos para peluches o en gratos accesorios para las rutinas de baile. Las tapas de los frascos de vidrio se convierten en sellos para crear patrones complejos en plastilina o en una cama para una querida figurita de perro. Las cajas grandes de cartón alzan el vuelo convertidas en aviones o brindan la oportunidad para que el niño construya y decore su propia heladería. A continuación, le indicamos cómo comenzar.
Reúna piezas sueltas
Busque los siguientes artículos en su hogar o anime a los estudiantes a realizar una búsqueda del tesoro para encontrarlos. Luego, guarde los artículos en cajas pequeñas, recipientes de plástico o cestas. Es importante almacenar estos materiales a la altura de los ojos en un área de juegos dedicada para que los niños puedan acceder a ellos fácilmente. Entre los artículos, se pueden incluir: tiras de papel, tapas de botellas, tapas de frascos de vidrio, bufandas, cintas, rizadores de pelo, cajas de pañuelos de papel vacías, tubos de papel higiénico, corchos, garrafas plásticas de leche, recipientes de especias vacíos, latas de sopa limpias (sin el borde afilado), llaves, botones, cucharas de madera, pinzas de ropa, campanas, cartones de huevos, moldes para muffins, gemas de plástico, pompones, cuentas y portalatas de plástico.
Use fichas de actividades para jugar con piezas sueltas
Pida a los cuidadores de los niños que impriman y recorten las fichas de actividades para jugar con piezas sueltas.* Las fichas se deben colocar en un receptáculo como un sombrero, una caja, una canasta, una caja de zapatos o una bolsa. Luego, pídales a los niños que elijan algunas actividades para hacer cada día (recuerde ayudar a los niños leyéndoles las actividades que elijan). Después de que hayan elegido las actividades, pida a los niños que usen las piezas sueltas que hayan encontrado junto con otros artículos que haya en la casa para realizar la actividad. Entre los artículos adicionales están pegamento, cuerdas, tijeras, etc. Al final del día, vuelva a colocar las actividades en el receptáculo para que los niños puedan elegir otras al día siguiente. Los cuidadores pueden ayudar a los niños con esto en casa. No importa repetir las actividades, ya que la repetición apoya el desarrollo de habilidades fundamentales.
Incorpore elementos naturales
Además de los artículos cotidianos que se encuentran en el hogar, también se pueden incorporar artículos naturales al juego con piezas sueltas. Pida que los niños busquen palitos, piedras, hojas, pétalos de flores, conchas, bellotas, piñas y otros elementos cuando salgan a dar una caminata por la naturaleza en el parque o el patio. Estos elementos naturales se pueden incorporar al área de juego bajo techo, pueden manipularse durante las actividades de clase o pueden guardarse en un área de fácil acceso para llevarlos afuera durante los ratos de exploración de la naturaleza.
Sea creativo
Todo es posible con las piezas sueltas. Yo guardo casi cualquier cosa que pueda despertar la curiosidad de mi hija, desde viejas patas de mesa de madera hasta cajas grandes. Estas son otras ideas adicionales:
Watch a box turn into a spaceship, and old wooden table legs become a welcome addition to block play as children create epic castles and structures.
- Observe cómo una caja se convierte en una nave espacial y las viejas patas de madera se convierten en una grata añadidura al juego cuando los niños crean geniales castillos y estructuras con bloques.
- Incorpore oportunidades para explorar el arte usando una sábana vieja y colocando cajas y pintura para que los niños puedan aprovechar su imaginación.
- Cree un juego de mundo pequeño con plastilina, figuritas pequeñas, piezas sueltas naturales como bellotas y palitos, y gemas de plástico. El juego de mundo pequeño ayuda a los niños a explorar sus sentimientos, a pensar en ideas y situaciones que podrían ser diferentes de sus experiencias cotidianas, así como a desarrollar vocabulario.
- Utilice una variedad de piezas sueltas sintéticas y naturales, como gemas de plástico, hierbas (como romero, tomillo y orégano) y viejos pétalos de flores junto con la plastilina. También se puede agregar un toque de aceite esencial apto para niños, como limón o lavanda, si lo tiene a mano. Los niños pequeños aprenden usando múltiples sentidos simultáneamente, por lo que este tipo de juego sensorial es una forma comprobada de desarrollar habilidades cognitivas.
Déjelos jugar
Deles a los niños tiempo libre y no estructurado para explorar las piezas sueltas. Pueden incorporar figuritas de personas y animales en robustos juegos de simulación y de cuentacuentos, o usar una bufanda como manta para hacer un pícnic con amigos imaginarios. Pueden usar corchos, piñas, gemas de plástico y viejos moldes de muffins y hacer una comida de cumpleaños muy especial para su animal de peluche favorito.
¿De qué otras maneras podrían incorporarse las piezas sueltas en las experiencias de aprendizaje diarias?
Más información sobre el juego con piezas sueltas
- We Are Teachers: 22 Ways to Use Loose Parts for Teachers* (22 formas de usar piezas sueltas para maestros, de We Are Teachers)
- Loose parts: What does this mean?* (Piezas sueltas: ¿Qué significa?)
- Loose Parts Set* (Colección Piezas Sueltas), por Miriam Beloglovsky y Lisa Daly
- Video: What are Loose Parts? Benefits of Learning with Loose Parts video* (¿Qué son las piezas sueltas? Beneficios del aprendizaje con piezas sueltas)
*Recursos disponibles solo en inglés.