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Cinco formas de enseñar a niños de distintas edades

Un padre revisa un experimento con dos niños.
Un padre revisa un experimento con dos niños. | Mae Koo
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Publicado en inglés el 23 de abril de 2020.

A medida que las familias se adaptan a las continuas demandas del aprendizaje en el hogar, uno de los desafíos más persistentes es poder equilibrar las necesidades de enseñanza de niños de distintas edades. Para apoyar a un grupo de estudiantes con diferentes habilidades y capacidades de atención, puede ser útil encontrar actividades tranquilas que todos realicen a la vez, de modo que los padres puedan ir dedicando su enfoque y atención a los niños de acuerdo con las necesidades de estos. Este acto de malabarismo puede ser complicado incluso para educadores experimentados, pero estos cinco consejos pueden ayudarle a sortear las dificultades de manera más eficaz.

Haga lo que pueda

Comience por establecer expectativas realistas para usted y su familia. “No pretenda que los niños hagan tareas escolares durante siete horas al día”, aconseja Mary Fister, bibliotecaria de las Escuelas Públicas de Chicago, maestra de primaria y madre. Más bien lo que recomienda es “establecer metas realistas para cada niño en función de su edad, capacidad de atención y áreas en las que necesita más ayuda”.

Para muchos de nosotros, la brecha entre las metas que tenemos para los niños y lo que podemos lograr con ellos en la realidad es frustrante, abrumadora y desalentadora. Olvídese de la derrota y busque la victoria de otra manera: concéntrese en lo que puede hacer. Acepte que quizá no sea factible cumplir con todos los planes de aprendizaje a distancia o realizar todas las actividades asignadas a diario. En su lugar, intente dedicar un bloque de tiempo específico cada día para ayudar a su niño a abordar un proyecto o tarea determinados, y a partir de ahí, vaya desarrollando la aptitud de su familia para el aprendizaje remoto. Desista de lo que no se pueda lograr ese día o en ese momento o, si es del caso, de lo que no se podrá lograr del todo. Confíe en que lo que usted está haciendo es suficiente.

Planifique con anticipación: sea flexible y maneje las expectativas de los niños

Enseñar a nuestros niños sobre la marcha, aprender junto a ellos, distraernos a causa de nuestro trabajo y conexiones sociales, y tratar de balancear las demás obligaciones domésticas y de cuido puede ser abrumador. Domine ese sentimiento planificando con anticipación. Ya sea que esté haciendo una lista de tareas pendientes, actualizando un calendario o codificando con colores una hoja de cálculo con los nombres de usuario de varios niños, haga un plan modular de actividades diarias de antemano. Luego, esté anuente a adaptar ese plan a las necesidades de cada día.

“Tenemos un programa para cada hora del día, pero trato de revisarlo cada mañana y hacer los ajustes que sean necesarios, por ejemplo, si mi niño mayor tiene una reunión escolar durante la hora de actividad física o si parece que lloverá por la tarde”, comparte David Geerdes, un padre de Chicago que se ocupa del cuidado de sus tres niños, que van desde preescolar hasta quinto grado.

Si bien los niños saben lo que se espera de ellos cada hora, Geerdes también les da la flexibilidad de elegir actividades específicas dentro de cada categoría.

“Tienen la prerrogativa de cambiar ciertas cosas, siempre y cuando sea dentro de esa categoría”, dice. “De esta manera, pueden hacer ajustes aceptables por su cuenta, y yo tengo tiempo libre para manejar otras cosas del hogar y me involucro solo cuando ellos realmente me necesitan”.

Deje que los niños tomen la iniciativa

Empodere a sus niños para que tomen decisiones individuales sobre lo que pueden hacer y cómo. Usted decide el por qué, cuándo y dónde. Para mantener a niños de distintas edades trabajando por sí mismos en actividades aprobadas por los padres, Fister sugiere que estos últimos busquen oportunidades de aprendizaje que se ajusten específicamente a los intereses de los niños.

Para lidiar con intereses competitivos entre individuos, tome prestado este concepto de la improvisación teatral y adopte la técnica de “sí, y”. Este principio motiva a los niños a aceptar las ideas y preferencias de los demás y a desarrollarlas. Por ejemplo, a su niño mayor le encantan los dinosaurios y al menor le encantan los trenes (por cierto, hay un programa de PBS Kids que serviría en ese caso: Dinosaur Train.) Aproveche la oportunidad para presentar a sus niños el concepto de “combinar”. Combinar sus intereses para desafiarlos a crear, producir, construir o hacer algo juntos puede ser excelente para inspirar la resolución creativa de problemas, al tiempo que desarrollan habilidades sociales y emocionales básicas como la colaboración y la empatía.

Cuando usted pueda abordar las materias de estudio por temas de interés compartido, aplique diferentes maneras de enseñar para que los estudiantes se mantengan involucrados. “Comience con un tema y luego ajuste los parámetros en función de las edades de los niños”, recomienda Suzie Hicks, especialista en contenidos de aprendizaje preescolar de PBS SoCal. Haga ajustes en función de las diferencias en conocimientos, habilidades y capacidades de atención ofreciendo estimulación variable para la actividad relacionada con el tema. Por ejemplo, si sus niños están trabajando en historias sobre criaturas míticas, deles a los estudiantes que no escriben la oportunidad de contar la historia con dibujos o representándola con juguetes. Cuando el más pequeño haya terminado, anímelo a jugar por sí solo mientras usted revisa la escritura del estudiante mayor. Amplíe el trabajo independiente de los niños mayores pidiéndoles ilustraciones o una presentación más formal para compartir y celebrar su obra terminada. Esto podría darle a usted la oportunidad de jugar con el niño más pequeño o tomar un descanso de trabajo.

Fomente la enseñanza entre los niños

El aprendizaje por materias y por temas a través de diversas actividades para distintas edades también brinda una excelente oportunidad para que los niños más grandes enseñen a los más pequeños. Fister alienta a los padres a establecer un espacio de “aula” en el hogar donde esto pueda ocurrir. “Será educativo para ambas partes”, explica. Los estudiantes mayores pueden preparar actividades de aprendizaje, como hojas de trabajo y juegos, para practicar la cuenta, las matemáticas, el alfabeto y el método fonético. Usted también puede pedirles a los estudiantes mayores que diseñen un experimento científico o un proyecto sencillo de ingeniería o arte mientras los estudiantes más pequeños juegan. Cuando “comience la clase”, el “maestro” y el “estudiante” podrán interactuar entre sí.

Si bien los niños más grandes pueden enseñar naturalmente a los más pequeños, también es importante encontrar formas de celebrar los talentos y habilidades únicas de estos últimos. Fomentar el entusiasmo y compartir ideas es una forma de hacerlo, según Hicks.

“En lugar de establecer roles, promueva el entusiasmo por el aprendizaje en general”, dice.

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Trabajar juntos es importante para los padres con niños de edades distintas, como esta madre con dos niños. | PBS SoCal

Adapte las mismas actividades a las distintas edades

Si le es muy difícil hacer cosas diferentes con diferentes niños, adapte las mismas actividades a las distintas edades de modo que todos se mantengan involucrados en el proceso de aprendizaje. Esta es otra forma de empoderar a los niños más grandes para que sean mentores de los más pequeños.

Como maestro de STEM (sigla en inglés de ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas) de kínder a sétimo grado, Greg Baker, de Kenosha, Wisconsin, a menudo adapta la misma actividad a los distintos grados.

“Una de mis actividades de ingeniería favoritas, que se puede hacer con cualquier grupo de edad, es la construcción de estructuras con artículos de uso diario (fichas, vasos de plástico, etc.)”.

Con el fin de construir la estructura más alta posible, los grados primarios se centran en el equilibrio y una base sólida, mientras que los niños mayores discuten la distribución del peso, la fuerza y el proceso de diseño de ingeniería.

“Todos los estudiantes trabajan en la construcción de las estructuras, pero mientras la primaria piensa en el ‘qué’ y el ‘cómo’ de la construcción, los estudiantes mayores están comenzando a explorar el ‘por qué’”, dice Baker. “Como sucede con todas las actividades buenas de STEM, siempre terminamos con una reflexión sobre cómo pueden mejorar su diseño para la próxima vez”.

Sandra Cruz, coordinadora de aprendizaje preescolar de PBS SoCal, anima a las familias a buscar acontecimientos y materiales cotidianos para explorar conceptos como la investigación científica y el proceso de diseño de ingeniería. Los recursos de aprendizaje en el hogar de PBS At-Home Learning están diseñados específicamente para guiar a los estudiantes de todas las edades a ir pensando en esos próximos pasos de manera natural.

“El proceso de investigación científica y de diseño de ingeniería no es específico de la edad”, dice Cruz. “Si podemos prender la chispa que ayuda a los niños a explorar e investigar su mundo cotidiano, quizá se encienda un fuego”.

*Recurso disponible solo en inglés.