Campamento de duelo ofrece recursos para niños que han perdido a uno de sus padres
Explicarles a los niños pequeños qué significa el duelo, la muerte y la mortalidad puede ser extremadamente difícil. La organización sin fines de lucro Our House brinda asesoramiento y recursos en inglés y español para familias y niños del área de Los Ángeles. Dos veces al año, organizan un campamento para niños y cónyuges en duelo.
Estas son 10 cosas que los consejeros de Our House quieren que los padres sepan sobre los niños y el duelo:
Más que todo, los niños necesitan que usted se cuide: cuanto mejor se adapte usted a la vida sin la persona que murió, mejor se ajustará su niño.
Es un sofocante día de agosto en un campamento de Glendale, California, y unos doce niños de 12 años, con gafas protectoras y platos de vidrio en las manos, se encuentran reunidos.
Un niño con una camiseta roja de Angry Birds se levanta y apunta su plato a la pared. Sus compañeros están de pie tras él. "Quiero desahogar el enojo que siento hacia mis amigos de la escuela… por no entender". Da un paso al frente y lanza el plato hacia delante. El plato se estrella contra la pared y se quiebra, mientras sus amigos aplauden y gritan.
Esto es Camp Erin, un campamento de duelo para niños que han perdido a uno de sus padres. El campamento comenzó hace 20 años en Los Ángeles, a cargo de la organización sin fines de lucro Our House y con fondos de la Red Eluna.
Niños de 5 a 18 años vienen a acampar durante un fin de semana. Se dividen en grupos de acuerdo con la edad y participan en actividades destinadas a ayudarles en su proceso de duelo, como quebrar platos para liberar el enojo, terapias de música y baile, y escritura de cartas al progenitor fallecido.
"Camp Erin es la mejor parte de lo que hacemos… Es sencillamente algo que da mucha luz y significado a nuestro trabajo", dijo Lauren Schneider, directora clínica del programa de niños y adolescentes de Our House.
Schneider dijo que la necesidad de servicios de duelo se ha disparado desde la pandemia. En los Estados Unidos, casi 8 millones de niños perdieron a uno de sus padres* o a un cuidador primario debido a la COVID-19. La pandemia también cambió la forma en que los niños y las familias viven el duelo, dijo Talya Schlesinger, directora de Camp Erin Los Ángeles.
"La gente estaba muriendo sola. Nadie podía comunicarse con sus seres queridos o con sus padres ni antes ni después de la muerte… Ahora escuchamos multitudes de niños contando estas historias", dijo Schlesinger.
Este fue el primer año en que Our House también invitó a los padres a asistir a Camp Erin. Los cónyuges en duelo pudieron participar en un campamento que estaba a poca distancia del de los niños. Los padres se sentaron en círculo y compartieron historias sobre las preguntas que sus niños pequeños les habían estado haciendo acerca de la muerte y cómo salir adelante. Un traductor estuvo presente para facilitar la conversación.
"Tener un campamento separado para padres fue genial. El trabajo que hacemos con los niños solo tiene impacto si hay un ambiente adecuado en el hogar y la familia, así que es muy gratificante e importante darles herramientas a sus cuidadores", dijo Schlesinger.
Uno de esos padres es Steven Orrit. Orrit perdió a su esposa Jenna en 2020 a causa de un tipo raro de cáncer de mama.
"Una de mis mayores luchas ha sido la transición de un mundo a otro: pasé de ser su cuidador y esposo a ser un padre soltero de dos niños pequeños", dijo Orrit. "Al principio, después de que Jenna murió, lo más difícil fue aprender a tener esas conversaciones tan difíciles con mis niños". Los hijos de Orrit, Henry y Lucy, tenían 3 y 6 años cuando su madre murió. Asistieron a las sesiones de verano e invierno del campamento.
En Camp Erin, los padres aprenden a tener conversaciones francas sobre la muerte con sus hijos pequeños.
Schneider dijo que los niños pequeños que pierden a uno de sus padres a menudo no pueden comprender plenamente la pérdida y terminan demostrando su dolor a través del comportamiento, ya sea porque se encierran en sí mismos o porque arremeten contra los demás. En Camp Erin, los voluntarios están capacitados para percibir esos comportamientos. Las actividades tienen el fin de ayudar a los niños a ponerse en contacto con sus sentimientos y aprender nuevas habilidades para superar los problemas, tales como hablar con amigos, dibujar y escribir en un diario.
Estos son dos ejercicios de respiración que Our House recomienda para los niños que enfrentan un duelo:
Our House ha ofrecido un programa escolar en los distritos de Los Ángeles desde 1997. Schneider dijo que Our House está profundamente arraigada en 19 distritos y escuelas particulares. La organización llevaba consejeros y voluntarios a las escuelas, y los estudiantes podían participar en grupos y servicios de consejería en cualquier momento. En su apogeo, atendían a más de 800 niños, pero Schneider dijo que el programa escolar fue impactado por la pandemia, pues los servicios no se podían brindar en persona.
"Nuestros programas escolares e infantiles han bajado casi un 70 %… aunque sabemos que existe la necesidad, tal vez ahora más que nunca. La gente está desesperada por recibir apoyo con el duelo, pero no sabemos cómo informarles que estamos abriendo nuestras puertas nuevamente", dijo Schneider.
Todos los grupos de duelo de Our House estarán disponibles en persona este año en sus tres ubicaciones: oeste de Los Ángeles, Woodland Hills, y en su nuevo local en Mid-City. Our House ofrece todos sus servicios en español e inglés. La organización sin fines de lucro organizará Camp Erin de nuevo este invierno.
"El objetivo es que las habilidades socioemocionales que los niños aprendan y los amigos que conozcan en Camp Erin o en sus grupos de duelo vayan más allá de una vivencia de un día, y realmente les ayuden a normalizar su experiencia de pérdida mientras siguen adelante con la vida", dijo Schneider.
Si usted o su hijo están teniendo dificultades a raíz de un duelo, llame a Our House al (310) 473-1511 para obtener recomendaciones adicionales y apoyo.
*Recursos disponibles solo en inglés