6 ideas para ayudar a los niños a procesar grandes emociones
Íbamos entrando a una fiesta de cumpleaños cuando mi hija comenzó a aferrarse a mí. Después de hablar de esta fiesta durante días, mi niña en edad preescolar, que antes estuvo emocionada, ahora lloraba y se negaba a unirse a sus compañeros. Nos sentamos en silencio, hablamos sobre lo que la ponía nerviosa y decidimos quedarnos a un lado hasta que ella se sintiera cómoda con el nuevo entorno y los fuertes ruidos. Una vez que su ansiedad disminuyó, mi niña andaba correteando con una sonrisa llena de confianza en sí misma.
Los niños procesan muchas emociones a la vez y recurren a los adultos afectuosos y de confianza de sus vidas para que les ayuden a superar el miedo, la ansiedad y el estrés. Cuando hacemos una pausa para reconocer y hablar sobre los sentimientos, fortalecemos la inteligencia emocional de los niños y su confianza en sí mismos, dice la National Association for Education of Young Children* (Asociación Nacional para la Educación Infantil).
Consejos para aceptar las emociones
Estos son algunos consejos para ayudar a su niño a comprender y aceptar diferentes emociones.
Reconozca los sentimientos
Pasar de “no hay nada que temer” a “veo que te sientes asustado” valida los sentimientos de los niños y allana el terreno para la futura autoconfianza y el autocontrol positivos. Puede que algo no le cause temor a usted, pero practique la empatía y recuerde que los niños experimentan cosas nuevas todos los días. En este ejemplo del Vecindario de Daniel Tigre,* Papá Tigre reconoce los sentimientos de Daniel cuando le tiene miedo a las sombras.
Asegúreles a los niños que todos los sentimientos son aceptables
Los niños pueden pasar de la emoción al temor y al enojo en un abrir y cerrar de ojos. Como nos recuerda Plaza Sésamo, “desarrollar un robusto vocabulario de sentimientos es como desarrollar un músculo: requiere ejercicio, práctica y esfuerzo”. Primero, pueden probar la estrategia Sing It Out* (Cántalo) de Elmo, o cualquiera de los juegos y actividades imprimibles e interactivas de la colección Expressing Emotions* (Expresa tus emociones), de Plaza Sésamo en las comunidades, para ayudar a los niños a identificar una variedad de emociones. Luego, proporcione un espacio seguro para que su niño exprese sus sentimientos ya sea hablando, cantando o leyendo con usted.
Podemos tener muchos sentimientos al mismo tiempo
Cuando Daniel Tigre quiere montarse en la rueda de Chicago,* se siente nervioso y emocionado y recuerda que “a veces sentimos dos emociones al mismo tiempo y eso es aceptable”. Ayude a su hijo asegurándole que es normal sentir muchas emociones simultáneamente. Juntos, compartan esas emociones* en voz alta y traten de encontrar un equilibrio entre las emociones rivales.
Tres ideas de experiencias prácticas
Hablar sobre las emociones y observarlas ayuda a los niños a desarrollar salud mental positiva, conciencia de sí mismos y confianza emocional. También podemos apoyar ese proceso con experiencias de aprendizaje prácticas y tangibles. Pueden probar algunas de estas manualidades de bajo costo y poco desorden:
Hagan un bichito de preocupación con plastilina
A veces, tener un objeto concreto que puedan sostener, tocar o aplastar ayuda a los niños a procesar sentimientos que no pueden ver.
“Para un niño, usar algo tangible que fomente su creatividad permite la transferencia natural de las emociones” de lo interno a lo externo, dice la trabajadora social clínica Niamh Kennaugh.
Usen arcilla o plastilina para esculpir un “bichito de preocupación” a su gusto. Como sugiere el Marco conceptual del currículo infantil de California, usted puede permitir la creatividad abierta al preguntar: “¿Qué aspecto tiene tu bichito de preocupación?”. Cuando el niño experimente emociones fuertes, piensen en una estrategia para aplastar al bichito.
Diseñen un atrapador de sentimientos
Con materiales cotidianos, construyan un atrapador de sentimientos que se puede colocar en la casa para que atrape las emociones fuertes.
- Para comenzar, corten pequeñas muescas en los bordes de un plato de cartón.
- Luego, entretejan limpiapipas o cuerdas de un lado a otro del plato para formar una red que “atrapará los sentimientos”. Si prefieren otro diseño, pueden hacer un agujero en el centro del plato para que las piezas entretejidas de la red sean más visibles.
- Agreguen cintas, serpentinas o lanas colgantes a la parte inferior y coloquen un limpiapipas doblado en la parte superior para formar un gancho.
- Coloquen el atrapador de sentimientos en el pomo de una puerta, el refrigerador o la mesita de noche. Pídale al niño que describa los sentimientos que quedan atrapados en la red.
Hagan flotar las emociones con pompas de jabón
Hagan pompas de jabón caseras con jabón de platos, agua y un vaso desechable.
- Corten el fondo de un vaso de plástico o de cartón para formar una abertura y mezclen agua y jabón de platos en un tazón.
- Sumerjan la taza boca abajo en el tazón.
- Soplen a través de la abertura para formar las pompas de jabón.
- Luego, pídale al niño que coloque sus emociones fuertes en las pompas de jabón y observe cómo se van flotando. Recuerden que está bien si los sentimientos perduran un rato. Ver las pompas de jabón flotando puede ayudar al niño a concentrarse y a calmar su cuerpo.
Los niños pequeños sienten grandes emociones. Como cuidador, usted tiene todas las herramientas que necesita para ayudarlos a desarrollar su inteligencia emocional.